Juzgado en Girona un hombre acusado de violar a una niña de 14 años con discapacidad

La Audiencia de Girona ha juzgado a un hombre acusado de violar a una menor de 14 años con discapacidad en Vilajuïga en 2022. Las acusaciones le piden 13 años de prisión por un delito de agresión sexual a un menor de 16 años. La víctima no ha asistido al juicio y la sala ha reproducido la declaración que hizo tres días después de los hechos. En el momento de los hechos, estaba en un proceso de transición al género femenino.
Según su relato, la tarde del 29 de junio de 2022 fue a los alrededores del Ayuntamiento porque había quedado con unos amigos y los estaba esperando. En ese momento, el acusado, a quien no conocía, se le acercó y le preguntó qué horarios tenía el Centro de Atención Primaria, que está situado justo al lado. Durante la conversación, el hombre le agarró el brazo y la llevó a uno de los bancos que hay debajo de los arcos del ayuntamiento. Entonces, le hizo tocamientos y la agredió.
La víctima logró escaparse y se lo explicó a sus padres de acogida. Como vio que el hombre se había sentado en la terraza de un bar, fueron a buscarlo para pedirle explicaciones. Según han explicado sus tutores, el hombre lo negó todo y dijo que «nadie había visto nada». Los Mossos d’Esquadra lo detuvieron en el lugar.
El procesado ha indicado que él había venido a Vilajuïga a buscar documentación al CAP, y que en ese momento estaba sentado y la víctima se le acercó y comenzó a hablarle. Él ha dicho que no entiende el castellano y que no entendió nada de lo que le decía. La conversación habría durado entre diez y media hora, según ha dicho, y luego la menor se fue y él se fue a un bar. A los diez minutos, la familia de la víctima lo abordó en el local, e insistió en que no entendió lo que le decían. Ante las preguntas del fiscal, ha indicado que llegó a España en 2008 y que solo entiende algunas palabras técnicas relacionadas con el trabajo.
Los tutores de la víctima han explicado que la acogieron cuando tenía cinco años, y que el día de los hechos fue el primero en el que había comenzado el proceso para vestirse de niña en el municipio. Los psicólogos del equipo técnico que evaluaron a la víctima no encontraron ningún síntoma de sugestión ni fabulación en su relato. La menor sufre un retraso madurativo por el cual tiene una apariencia y actitud más infantil de lo que le correspondería por la edad, y tiene diagnosticado un 65% de discapacidad.