Catalunya decretará la emergencia por sequía este jueves
La región de Barcelona y Girona entrará en la temida fase de emergencia debido al descenso continuado del nivel de los embalses del Ter y Llobregat desde el verano de 2022, así como a la falta de infraestructuras para afrontar esta escasez. Los embalses del Ter y Llobregat están por debajo de los 100 hm3, el umbral que marca la máxima alerta (16,3%), pues se ha situado en el 99,89 hm3.
El Gobierno ha convocado una reunión de la Comisión Interdepartamental de Sequía para declarar la alerta máxima en las zonas servidas por los embalses del Ter y Llobregat. Esta decisión conllevará restricciones más severas de agua, reduciendo las dotaciones de la Generalitat a los municipios a 200 litros por persona y día para todos los usos, impactando incluso en el ámbito doméstico.
Ahora corresponde a los ayuntamientos imponer restricciones a los ciudadanos para los usos domésticos. Se prevé que las entidades locales puedan reducir los consumos, disminuyendo la presión del agua o implementando cortes horarios, según sus planes municipales de emergencia. Estas medidas afectarán a 202 municipios de la región de Barcelona y parte de Girona en la unidad hidrológica del Ter y Llobregat.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell Executiu, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, indicó que el sistema Ter Llobregat ya está al 16,3% de su capacidad. A pesar de que los embalses alcanzaron un volumen de 100,1 hectómetros cúbicos el lunes, una décima por encima del umbral de alerta, hoy ya están por debajo de ese nivel.
La fase de emergencia también aumentará las restricciones para usos agrarios (80%) e industriales (25%). La Comisión Interdepartamental de Sequía se reunirá de manera extraordinaria para concretar la entrada en la fase de emergencia «en los próximos días».
El conseller d’Acció Climàtica, David Mascort, y la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, informarán el jueves, 1 de febrero, a las 12 horas, de los acuerdos alcanzados durante la Comisión Interdepartamental.
La fase de emergencia implicará restricciones adicionales, como la reducción de la dotación de agua a 200 litros por persona y día para todos los usos, excepto los deportivos. Se prohíbe el llenado total o parcial de piscinas y se establecen tres estadios de restricciones, según el volumen de agua en los embalses.
En las subfases de emergencia I y II, se protegerá la práctica deportiva permitiendo el relleno parcial de piscinas cubiertas registradas en el censo de equipamientos deportivos de la Generalitat, y de piscinas al aire libre utilizadas para prácticas deportivas federadas, siempre que cuenten con un sistema de recirculación del agua.
La fase de emergencia también afectará a los usos industriales y agrarios, incrementando las restricciones. La reducción de la presión del suministro de agua se iniciará en municipios que superen los 200 litros por persona y día, establecidos por la Generalitat.
